La interpretación de los sueños

Los sueños son proyecciones de la mente, cuestiones misteriosas, surrealistas y ocultas. Los psicoanalistas son los científicos dedicados al estudio del mundo onírico. Dentro de los más importantes cabe mencionar a Sigmund Freud, el padre de la psicología. Freud dedicó gran parte de su vida a la investigación del mundo onírico, el sueño REM, y otros temas. En sus obras plasmó las conclusiones, después de años de investigación en pacientes. Freud reconocía que la experiencia onírica era única, cada individuo tenía su propio lenguaje simbólico para codificar los sueños. Para Freud los sueños representaban aspectos reprimidos del ser humano, que buscando expresión en el subconsciente se manifestaban en forma de sueños, de tal manera que para el soñante era más fácil aceptar aquellas expresiones censuradas por su yo consciente. La mayoría de los temas que abarcaban los sueños, para Freud, eran la sexualidad, la muerte y la vida.

Pero Freud no era el único psicoanalista importante de su época. Carl Jung, le pisaba la capa a Freud. Carl Jung tenía evidencias de que los sueños no sólo eran manifestaciones de aspectos reprimidos del ser humano, sino que el mundo onírico pertenecía a una forma de conciencia universal, interconectada entre las personas, de tal manera que para un soñante una proyección de su mente también podía corresponder con alguna información que habitara esta plataforma universal de conciencia.

Por si fuera más enigmático todo este mundo onírico, Sigmund y Carl se conocieron, y fueron buenos amigos. Pero su amistad no duró para siempre. Precisamente en un desacuerdo frente a la interpretación de un sueño de Carl Jung es que se enojan y terminan su amistad.

Carl Jung aceptaba la hipótesis de la proyección subconciente del yo represor, pero agregaba de que no era la única explicación del por qué se producían los sueños, pues si un individuo se liberaba de esas represiones, entonces simplemente dejaría de soñar, y Carl comprobó que efectivamente eso no sucedía. Por esto Jung afirmaba que las experiencias reprimidas bastaban para explicar sólo una parte de este enigmático mundo onírico.

Ambos psicoanalistas apoyaban la idea de que la interpretación de los sueños propios contribuía al autoconocimiento, siendo una parte importante en el desarrollo de todo ser humano.

Después de leer la frase anterior quizás te sientas un poco decepcionado de ti mismo si no has sido capaz de interpretar tus sueños, pero nunca es tarde para empezar. Puedes anotar tus sueños, y luego hacer relaciones deliberadas con tu pasado o tu familia, traumas, etc. Siempre anotando las ideas que te quedan al respecto. Así podrás desarrollar el poder de la interpretación de los sueños.

Para Jung, la conciencia universal del mundo onírico tenía nada que ver con el mundo de la magia, para él era algo tan real y aceptado que simplemente hablaba de la conciencia universal como si lo hubiese experimentado miles de veces. Tendremos que leer sus obras para saber a cabalidad cómo llegó a poseer ese convencimiento tan profundo sobre el mundo onírico.