Cualidades: claridad, serenidad, integración.
Chakras: sexto (entrecejo) y séptimo (la coronilla)
La amatista es una variedad de cuarzo, de color violeta. Tradicionalmente se incluía entre las piedras preciosas más valoradas (junto con el diamante, el rubí, el zafiro y la esmeralda).
El nombre de amatista proviene del griego amethystos (no borracho), ya que esta piedra era considerada un potente antídoto contra la embriaguez. Según la mitología griega, Dionisio, dios del vino y del desenfreno, pretendía a una doncella llamada amethystos, la cual deseaba permanecer casta. La diosa Artemisa escuchó sus plegarias y transformó a la mujer en una roca blanca. Dionisio, humillado, vertió vino sobre la roca a modo de disculpa, tiñendo así de púrpura los cristales.
En el antiguo Egipto se utilizaba para crear joyas, sellos personales y tallas. En la edad media, el cristianismo adoptó la amatista como símbolo de renuncia a los bienes terrenales y castidad, llevándola aún hoy en forma de anillo muchos cardenales y obispos. La amatista simboliza además la sabiduría divina.
Propiedades curativas de la amatista:
- Ayuda a sentirse más abierto y consciente espiritualmente.
- Ayuda a proyectar hacia afuera los problemas emocionales.
- Permite limpiar el aura y crear un campo energético positivo alrededor de la persona que lo utiliza.
- Nos ayuda a transmutar nuestros pensamientos negativos en positivos.
- Clarifica la mente.
- Facilita el proceso de toma de decisiones, aportando sentido común he intuiciones espirituales.
- Favorece la comprensión y la persuación.
- Ayuda a sobrellevar la depresión.
- Ayuda en el proceso de transición a la muerte.
- Calmante y tonificante en caso de estrés. nerviosismo, ansiedad, angustias o miedos.
- Facilita el sueño, el descanso y la sensación de paz.
- Ayuda a recordar y comprender los sueños.
- Genera sueños intuitivos.
- Como terapia antiestrés en baños de tina con aceite esencial de lavanda y sumergiendo piedras de amatista, acompañado de musica relajante y velas.
- Ayudan a equilibrar el ambiente de trabajo y protege de las radiaciones electromagnéticas.
- Potencia la memoria.
- Mejora la motivación.
- Refuerza el sistema endocrino e inmunitario.
- Limpia la sangre.
- Reduce los cardenales.
- Alivia las heridas y la hinchazón.
- Favorece el funcionamiento de las glándulas pituitaria y pineal.
- Favorece el funcionamiento del hemisferio derecho del cerebro.
- Reduce el dolor de cabeza.
- Puede reducir los problemas de la piel, asma, y problemas gástricos.
- Ayuda a superar adicciones.
- Ayuda en la meditación.
- Limpia los ambientes con energías negativas de rabia y violencia.
- Crea armonía.
- Proporciona ayuda en los momentos de angustia.
Fuentes: www.espiritugaia.com